El empaque
Muchos de los importadores no precisan el modo de empaquetar las mercancías por lo cual unas cantidades enormes de productos mal protegidos llegan en mala condición y no pueden ser vendidos. Embalaje adecuado protege los productos y ayuda a evitar reclamos y disputas con los proveedores.
También, antes del envío de los productos es recomendable ponerse de acuerdo con el proveedor sobre la manera de empaquetarlos. Por supuesto dependiendo del producto y su función las reglas van a ser distintas. El embalaje va a ser diferente para productos hechos de vidrio, plástico o aparatos electrónicos. Vale la pena encontrar un socio de confianza que sepa qué tipo de embalaje es necesario en cada caso y hacerlo muy claro en el contrato. ¡No se olvide de la cuestión de reclamos, que también tiene que ser bien regulada!
Es más, si las mercancías vienen en cartones, es bueno colocarlas en palés envueltas en plástico. Así protegemos los productos y también los hacemos más fáciles de manejar.
Al recibir los productos es bueno examinarlos detalladamente para ver si no falta alguna parte de ellos o no han sido dañados. También vale la pena guardar el material de embalaje, los productos defectuosos y todos los documentos relacionados con la carga como pruebas, para luego hacer una investigación.
Reclamos y garantía
Si va a reclamar los productos, es preciso organizar un control detallado del envío.
Si los productos sufrieron daños por ser mal empaquetados, tendremos que reclamarlo con la compañía responsable del envío. Si tenemos una póliza, hay que solicitar recompensa de acuerdo con el trámite preestablecido.
Probablemente tendremos que documentar los daños con evidencia en forma de fotos y grabaciones vídeo. También habrá que rellenar una serie de formularios y habrá que preparar una valoración de pérdidas a base del importe indicado en la factura. La valoración debe presentarse al departamento de reclamos. No se olvide que algunos costes, tales como el IVA, no siempre se reembolsan.
En todo caso lo mejor es evitar reclamos y asegurarse que los productos han sido empaquetados de manera segura y correcta antes del envío.
¿Con o sin reembolso?
¿Qué es lo que pasará si recibimos un lote de productos defectuosos?
Primero, tenemos que contactar nuestro proveedor para averiguar si cumplió todos los puntos del contrato (por eso le recomendamos firmar un OEM con información sobre el embalaje y las etiquetas de los productos).
Si el proveedor cometió un error, seguro que nos ofrecerá un reemplazo de productos o un descuento para el pedido siguiente.
Esto puede conllevar riesgo porque en la mayoría de los casos la calidad de partes de repuesto no es satisfactoria, mientras que el descuento puede interpretarse como falta de interés por nuestro pedido de parte del proveedor dado que así el margen de beneficio es aún más bajo que lo previsto.
También existen otras opciones: podemos reenviar los productos a China para que los reparen (pero aquí lo que cuenta es el tiempo y el coste de transporte), o repararlos en nuestra empresa, o bien buscar una empresa que se ocupe de eso en nuestro país.
Sin embargo, la mejor solución es investigar el problema para solucionarlo una vez por todas y evitar que vuelva a ocurrir en el futuro.
Certificados de laboratorio: mejor tenerlos
Vale la pena prestar atención a los certificados de laboratorio para asegurarse que lo que compramos está de acuerdo con las regulaciones del país en el cual queremos venderlo. Como importador, usted será el responsable de la seguridad de los productos y todos sus componentes. Algunos productos requieren atención especial, por ejemplo juguetes, productos químicos, componentes electrónicos y eléctricos – todos estos productos tienen que cumplir las normas locales si queremos evitar problemas con la ley.
Por eso vale la pena preguntar nuestro proveedor por certificados emitidos por laboratorios bien reconocidos y autorizados a hacer pruebas.
Sobre todo asegúrese que:
- el certificado presentado por la compañía es válido para todos los productos importados (todo el lote), porque normalmente las pruebas se hacen en muestras que se envían antes de que empiece la producción;
- la documentación e informes sobre las pruebas de laboratorio no son falsos;
- si no hay ningunos cambios en los componentes de la producción, el certificado sigue siendo válido, pero en el caso de cualquier cambio hay que solicitar un examen de productos nuevo;
- hay que averiguar si el laboratorio indicado está autorizado a examinar los productos y si tiene el certificado ISO17025.
Po último, la siguiente página web contiene información útil sobre los laboratorios autorizados: